Smile and Carpe Diem

Would you know my name if I saw you in heaven ?
Will it be the same if I saw you in heaven?
I must be strong, and carry on because I know I don't belong here in heaven~

~Eric Clapton


~ Our love is like the wind... I can't see it, but I can feel it ~*

martes, octubre 04, 2011

We'll come back to Wonderland.

Hope u like my job :)

sábado, abril 16, 2011

I have lived to see the lovers' final breath !


Cómo me gustaría poder entregar mi alma;
Desprenderme de la ropa que se convierte en mi piel;
Ver al mentiroso que quema dentro de mi necesidad.
Cómo me gustaría haber escogido la oscuridad que el frío.
Cómo me gustaría haber gritado en voz alta,
En su lugar no he encontrado ningún significado.

Creo que es hora de correr lejos, muy lejos, encontrar consuelo en el dolor,
Todo el placer es el mismo: me mantiene en el problema.
Escondo mi verdadera forma, como Dorian Gray.
He oído lo que dicen, pero yo no estoy aquí por problemas.
Es algo más que palabras: es apenas lágrimas y lluvia.

Cómo me gustaría poder caminar a través de las puertas de mi mente;
Tener a mi memoria al alcance de mi mano.
Me ayuda a entender los años.
Cómo me gustaría poder elegir entre el Cielo y el Infierno.
Cómo me gustaría salvar mi alma.
Tengo tanto frío del miedo.

Creo que es hora de correr lejos, muy lejos, encontrar consuelo en el dolor,
Todo el placer es el mismo: me mantiene en el problema.
Escondo mi verdadera forma, como Dorian Gray.
He oído lo que dicen, pero yo no estoy aquí por problemas.
Lejos, muy lejos, encontrar consuelo en el dolor.
Todo el placer es el mismo: acaba de me mantener de problema.
Es algo más que palabras: son solo lágrimas y lluvia.

Lágrimas y lluvia.

Lágrimas y lluvia.

Lejos, muy lejos, encontrar consuelo en el dolor,
Todo el placer es el mismo: acaba de me mantener de problema.
Es algo más que palabras: son solo lágrimas y lluvia.

viernes, octubre 01, 2010

No need to say goodbye


Se despertó en la mitad de la noche, su cabeza le daba vueltas. No sabía que hora era.
Se incorporó en su cama, miró a través de la ventana. La luna le devolvía la mirada.
Se tocó las mejillas, estaban húmedas. Se había dormido mientras lloraba; aún no podía creerlo.
Silenciosamente se levantó y se vistió con su capa negra. No pensaba en otra cosa que no fuera él. Se dirigió hacia su puerta y la abrió, el pasillo estaba vacío; las velas habían sido apagadas. Ni un alma vivía ya por esa parte del castillo. Tanteando la pared, ella fue avanzando, aún sus lágrimas caían. No se perdonaría jamás el haberlo dejado ir. El piso estaba frío, lo sentía con sus pies descalzos.
Llegó al lugar que buscaba; la luna se filtraba por entre los vitrales de su castillo e iluminaba tenuemente una puerta de roble magníficamente tallada que presentaba esrituras talladas en un idioma que ella no entendía. Sin embargo, sin pensarlo dos veces, abrió la puerta y entró.
Un aire frío se respiraba dentro de la habitación, la cama presentaba una fina capa de polvo y las cortinas estaban cerradas. La princesa las descorrió, dando paso a la suave luz de la noche. Miró su reflejo en el espejo y se quedó paralizada. Justo detrás de ella, se encontraba su verdadero amor. Iluminado, con su traje rojo, se encontraba él. El corazón de la princesa latió rápidamente mientras que el tiempo se detenía. Tímidamente fue cruzando la habitación, hasta estar a pocos pasos de él.
-¡León!- exclamó ella mientras lo abrazaba.
La túnica roja cayó al suelo. Lágrima sostuvo el gancho por un momento. Recogió el atuendo y se lo llevó al pecho, lo mantuvo fuertemente contra ella cómo si eso pudiera devolverle el amor que se le había quitado. Se acostó en el borde de la cama aún abrazada a la túnica y comenzó a llorar silenciosamente.
-Buenos días- una voz la despertó. Había amanecido y ella no tenía la capa puesta. Sintió a alguien abrazado a ella.
Sintió como le acariciaba el pelo, como respiraba contra su espalda. Lo sentía.
La princesa se volvió contra su amor, miró sus ojos castaños y disfrutó de la felicidad que sentía en ese momento; él, sin dejar de acariciarla, le devolvía la sonrisa. Su pelo castaño estaba desordenado y su mano comenzó a subir hasta su cuello. Ella lo tomó y acercó su rostro al suyo. Él dijo algo gracioso y ella le sonrió, estában a muy pocos centímetros. Él fue acercando cada vez más sus labios a los de la princesa hasta terminar en un beso, el más dulce que jamás se habían dado.
-Bienvenido a casa- le dijo ella.
-No he vuelto- respondió mientras se desvanecía en la oscuridad de la habitación.
Lágrima se aferró a la túnica y, angustiada, se sumió en un profundo sueño.


~Làgrima

jueves, septiembre 30, 2010

Wishing you were somehow here again~


Cómo deseo volver a escuchar tu voz,
pero sé que no podré.
Tantos años luchando contra las lágrimas...
¿Por qué no puede morir el pasado?
No más recuerdos, no más lágrimas silenciosas;
no más lamentos detrás de los llantos gastados.
Ayúdame a decir adiós.
Ayúdame a no mirar hacia atrás.
¡Cómo deseo volver a soñar!

Una vez fuiste mi única compañía,
fuiste mi amiga y hermana,
luego mi mundo se derrumbó.
¡Cómo deseo volverte a ver!
Sabiendo que no podré.
Soñando contigo, ayúdame a hacer algo con todo
lo que imaginé que podría.
No más recuerdos, no más lágrimas silenciosas
Ayúdame a decir adiós.

Campanas solitarias, ángeles esculpidos,
fríos y monumentales.
Hacen para ti de una mala compañía,
ya que eras cálida y gentil.

~Làgrima.



Te extraño, gandma.

sábado, septiembre 04, 2010

Carpe Diem


Oh Capitán, mi Capitán:

nuestro azaroso viaje ha terminado.
Al fin venció la nave y el premio fue ganado.
Ya el puerto se halla próximo,
ya se oye la campana
y ver se puede el pueblo que entre vítores,
con la mirada sigue la nao soberana.

Mas ¿no ves, corazón, oh corazón,
cómo los hilos rojos van rodando
sobre el puente en el cual mi Capitán
permanece extendido, helado y muerto?

Oh Capitán, mi Capitán:
levántate aguerrido y escucha cual te llaman
tropeles de campanas.
Por ti se izan banderas y los clarines claman.
Son para ti los ramos, las coronas, las cintas.

Por ti la multitud se arremolina,
por ti llora, por ti su alma llamea
y la mirada ansiosa, con verte, se recrea.

Oh Capitán, ¡mi Padre amado!
Voy mi brazo a poner sobre tu cuello.
Es sólo una ilusión que en este puente
te encuentres extendido, helado y muerto.

Mi padre no responde.
Sus labios no se mueven.
Está pálido, pálido. Casi sin pulso, inerte.
No puede ya animarle mi ansioso brazo fuerte.
Anclada está la nave: su ruta ha concluido.
Feliz entra en el puerto de vuelta de su viaje.
La nave ya ha vencido la furia del oleaje.
Oh playas, alegraos; sonad, claras campanas
en tanto que camino con paso triste, incierto,
por el puente do está mi Capitán
para siempre extendido, helado y muerto.

~Walt Whitman


viernes, agosto 27, 2010


No llores por lo que fue.
Ríe por lo que es.
Sonríe por lo que será
Y grita por lo que dejó de ser.

Misterio Misterioso.


Trabajo para Taller de Producción Lingüística

Rayo de sol dorado,
color de la mantequilla,
tan rica como una vainilla.
¿Por qué chillas?
-
¿Qué pensarán de nosotros en Japón?
Sueño pesado como un bombo.
Si querés podés comer jabón,
pero prefiero el jamón.
-
Un árbol.
Un árbol, una pera.
Un árbol, una pera, un río.
Tan sombrío, como alguien que espera.
¿Gracioso?
-
Me extraña.
Tus ojos tan brillantes.
Tu boca prometedora.
Tu instinto asesino.
Me extraña, araña.